Mi alma
flota a la deriva
En la
planicie del tiempo
sobre una
tabla calada
presa está
surcando el viento
dejándose mecer al alba,
al fulgor
de los luceros.
Una
corbeta de nácar
se divisa
allá lejos,
trae
consigo la esperanzas
que es
ahora lo que anhelo.
Deseos de
amor e ilusiones
están
aguardando el momento.
¡Ojala!
no fuera un sueño
y aquella
corbeta de nácar
navegara
hacia mi encuentro…
Mi suerte
a la deriva,
y yo,
ajena al evento.
A la
deriva del alma
están dormitando mis sueños,
un
enjambre de ilusiones
en la
planicie del tiempo
deseosos
de ser rescatados
navegan surcando
el viento.
Una
corbeta de nácar,
entre mareas
de versos,
va danzando
a la deriva
en un mar
de sentimientos.
Margary
Gamboa.
"Ojala no fuera un sueño!
ResponderEliminary aquella corbeta de nácar
navegue hacia mi encuentro…
Mi suerte a la deriva,
y yo, ajena al evento".
Así se escribe. Es poesía en toda pureza.
Me ha gustado particularmente la estrofa que te repito.
Con afecto:
JT.
Hola Teodoro, hoy he descubierto este mensaje tuyo, pero desde ahora lo he configurado para que me avise el correo cuando me pongan algún mensaje, es que antes no lo tenía así.
ResponderEliminarGracias por estas palabras, siempre son bien recibidas y me alegra que haya sido de tu agrado. Voy a dar una vuelta para entretenerme un ratito por tu Caleidoscopio de colores, a ver que tinte de dulzura es el que resalta mas hoy.
Saludos.
Margary.